Cataluña Creativa.
Quisiera empezar señalando una serie de coincidencias que se dan hoy, aquí, y que son significativas: José Mª Ricarte quiso vivir y trabajar en Barcelona; el premio Ricarte, pensado por la UAB y la Associació Empresarial de Publicitat (Gremi), se ha hecho realidad aquí (apoyado luego por otras asociaciones profesionales nacionales), y ha sido acogido por el Ayuntamiento de Barcelona; en esta 3ª edición lo reciben dos conocidos innovadores y creativos catalanes, y la entrega -en este magnífico Salón de Ciento- la preside el Sr. Alcalde del Excelentísimo Ayuntamiento de Barcelona. Estas coincidencias prueban que innovación y la creatividad son consustanciales a la ciudad de Barcelona y a las gentes catalanas.
Los publicitarios tenemos más pruebas de ello a lo largo de muchas décadas.
El Premio José Mª Ricarte quiere ser un poco especial.
En el Comité fundacional del premio y en el Jurado, hablamos mucho del ADN Ricarte. No queremos premiar simplemente una tarea, ni la obra de toda una vida de una persona, sino que además queremos también señalar y premiar a esa persona como portadora de “instrucciones genéticas de creatividad” conocidas y cultivadas, que son las que han hecho posible su obra.
Porque entendemos que José María Ricarte, era consciente de que se podía mejorar el material genético de creatividad con el que llegaban sus alumnos; se podían desarrollar procesos de auto valoración creativa, despertar inquietudes, y propiciar la innovación entre los estudiantes, estimulando y orientando cualidades e inclinaciones que cada uno poseía.
A base de hacerles reflexionar filosófica y culturalmente, plantearles ejercicios mentales interactivos, preguntarles y preguntarles, se podía conseguir que aprendieran por sí mismos, -que estas cosas (como casi todas) no se enseñan, se aprenden-, y que consolidaran hábitos para encontrar ideas, y cumplir con las exigencias de la buena comunicación.
José María era un maestro, como lo fueron sus padres.
Entregamos los premios de Creatividad José María Ricarte, en su 3ª edición.
Jordi Évole.
Licenciado en Comunicación Audiovisual por la UAB, Jordi es todavía joven pero ya ha demostrado con creces ser un gran innovador, diferente y creativo en muchos territorios de la comunicación: Locutor, video-periodista, intérprete…, es actualmente productor, director y presentador de “Salvados” e programa de actualidad de la Sexta, sin dejar de escribir artículos en varios medios. Cuenta ya con bastantes premios: de radio, de televisión, de periodismo, de derechos humanos, del Trabajo Social…,
¿Por qué creemos que merece el premio?.. Ha sabido evolucionar desde el humor aun periodismo de entrevistas muy actual. Él mismo ha dicho: “Es un buen momento para el periodismo porque hay muchas cosas a descubrir. Nos lo está reclamando la ciudadanía… No hay que callar”.
No calla: busca la verdad. Y lo hace de un modo propio y distinto: fresco, desenfadado y valiente, incómodo si es preciso, y a la vez sereno, preguntando a quién nadie pregunta, preparando a fondo las entrevistas, escuchando, sabiéndose libre, y responsable. En realidad, ha creado un nuevo periodismo de actualidad en TV. Salvados es un programa de referencia.
Su audacia, innovación y creatividad, van a ayudar a que las cosas cambien.
No somos los primeros, en reconocer su innovación y creatividad como comunicador. Llegamos, ahora a darle el premio. Pero estamos felices de concedérselo Y le auguramos que seguirá consiguiendo muchos más. Merecidos. Los lleva en su genética. Enhorabuena
Ferrán Adriá.
En las reuniones del Jurado, el nombre de Ferrán Adriá apareció en seguida y defendido unánimemente. Era de esperar:
En 2004, ya hace 10 años, la revista Time lo incluyó en la lista de las 10 personas más innovadoras del mundo. El mundo es grande, la lista de 10…, corta. Y la clave está en que ha hecho esa enorme revolución creativa, desde la cocina.
Con 22 años llegó a El Bulli. Con 25 años ya era el Jefe, y justo en esa temporada de 1987, se juró -ha dicho- “no volver a copiar un plato de otro chef”.
En El Bulli nada era inmutable, se animaba a experimentar, a saltarse los códigos de la alta cocina. Preguntándose constantemente: ¿por qué? ¿por qué? ¿por qué?… Ferrán también ha dicho, de sí mismo, que “se cuestiona todo de una manera muy descarada”.
Y ese cuestionamiento de todo, esa pasión, ese impulso a innovar, a forzar los límites…, en un ambiente de libertad, honestidad, y emprendimiento, y en estrecha relación con la ciencia y el arte, llevó a el Bulli a enormes hallazgos de éxito global, insuperable. En el Bulli de Ferrán Adriá se cambió la historia de la cocina.
Pero a finales del 2009, Ferrán se hace otra pregunta: “¿Es esto lo que me hace feliz?” “¿Es esto el futuro que quiero?” Y decidió dar un cambio a la existencia de “El Bulli”, e iniciar una nueva época. “Antes creaba platos y ahora quiero crear creadores de platos”, ha dicho. No sólo. Hay mucho más.
Ha ampliado enormemente el campo de trabajo. Preguntando a mucha gente: del arte, de las nuevas tecnologías, de la economía, de las escuelas de negocios, escuchando, reflexionando, para dar forma y contenido a su “el Bulli foundation”: que tiene tres patas: “elBulli 1846”,(número de elaboraciones que se crearon en el restaurante en 24 años); “elBulliDNA”, que seguirá investigando sobre cocina y otras disciplinas), y la “Bullipedia” (interactiva on-line, aprovechando el poder de las nuevas tecnologías.)
Repensar, no dar nada por concluido, cuestionarse todo, asumir riesgos, dejar participar, conectar talentos, transmitir pasión y conocimientos…, muestran una vez más su capacidad creativa llevada a un nivel de excelencia y de eficacia insuperables.
Tiene centenares de premios. Grandes. Nosotros los del Jurado queríamos entregarle este otro más pequeño, el Premio Ricarte a la Creatividad. Y Ferrán Adriá nos lo ha aceptado. Gracias. Muchas gracias. Y enhorabuena por todo lo que ha hecho, y por lo que sigue y seguirá haciendo.
Nada más. Gracias a todos
J.B. 20 de mayo de 2014